viernes, 7 de junio de 2013

Duele tener que expresarse a través de las palabras convertidas en textos porque no tienes a nadie con quien hablar.
Duele tener que aguantarse las lágrimas porque quieres parecerte fuerte a ti misma, duele ver como estás destrozando tu vida y no saber que hacer para arreglarla, perderse en la multitud porque tú no encajas. Duele esperar a un futuro perfecto que sabes que nunca llegará, y es por eso por lo que te quedas mirando el pasado, recordando los buenos momentos que has pasado y que ahora no tienes, desando volver a ellos y matándote por dentro porque se han quedado en eso, en simples recuerdos.

Duele ver como palabras incontroladas salen de tu boca, y que no puedas pararlas, que no puedan pararte porque tu ya has aguantado mucho, y es por simples payasadas por las que tiras el mundo a la basura y te quedas frente a un ordenador, intentando desahogarte con tristes palabras que solo recuerdan lo mal que estás. ¿Pero a quien estoy intentando engañar?