Llega un momento en el que nada me puede hacer estar mejor.En el que nadie me puede sacar una sonrisa, y mucho menos, si no lo intentan. Porque quieras o no, es la cruda realidad. Que hay personas a las que nunca se les podrá llamar "amigos", porque no se merecen ese título, no se merecen ser agraciados con tal palabra, para que su tremendo ego incremente. Y luego estoy yo, tan gilipollas como siempre, tragando todas las mierdas que me lanzan como una ilusa, hasta que llega el momento en el que me atraganto, siento que no puedo más, que el mundo se me echa encima y no puedo sujetarlo.
TODO absolutamente todo me molesta, me siento insegura, inútil, y nadie me da razones para cambiar de mentalidad, porque cuando más necesitas a las personas, menos están ahí, y más daño te hacen.
No pretendo escribir para encantar, no estoy aquí para ello, me apetece desahogarme de una vez, porque este mundo me asfixia por todas las bobadas que hace la gente que me dejan sin respiración.
Y me cabreo con el mundo, como tantas veces lo he hecho, puede, que lo haga sin razón, pero lo he hecho, y resulta difícil dejar de hacerlo, porque siempre hay gente ahí, que se dedica a joderme a mí, mi vida, y todo lo que se le antoja.
Me doy cuenta de que siempre he vivido en una farsa, donde ya casi por obligación, tengo que estar siempre ahí con las personas, ayudando en todo lo ayudable, sacrificándome por hacer lo imposible. Me doy cuenta de que posiblemente, sea una sujetavelas, lameculos y no tenga personalidad. Y me doy cuenta cuando paso por un muy mal momento, cuando nadie me ayuda; que todo lo que yo he hecho por las personas, no lo hacen ellas de vuelta, que nadie es realmente un amigo, y que estás sola con un millón de palabras plasmadas en la pantalla de un ordenador que solo sirven para acordarse aún más de todo lo malo de esta locura.
Lo mejor del mundo es un abrazo con sabor a estoy aquí, contigo, y nunca te dejare.
viernes, 27 de abril de 2012
domingo, 22 de abril de 2012
Yo y mi estúpida manía de quererte tanto
Era de esperar, no?
Lo de olvidarte se me hizo imposible cuando de nuevo, te vi delante mía, mirándome a los ojos, y pronunciando unas palabras que se me hicieron imposible entender. Ese viejo cosquilleo que por un tiempo pensé haberlo superado, volvió, de una manera diferente, muy fuerte, casi irreconocible.
Y fue ahí, justo en ese instante, cuando mis piernas comenzaron a temblar, mi corazón latía más rápido de lo normal y casi no podía sostenerme en pie.
Volviste a hacerlo, no sé como ni de qué manera, pero lo hiciste, me volviste a enamorar, como una idiota volví a caer rendida a tus pies.
Sin embargo no me extraña nada, noté como esa llama no se había apagado del todo, se suponía que volvería a pasar, que me fue imposible olvidarte, ni tan siquiera el mero hecho que querer hacerlo me ayudó, simplemente, me hizo darme cuenta de que te quiero aún más de lo que pensaba.
Lo de olvidarte se me hizo imposible cuando de nuevo, te vi delante mía, mirándome a los ojos, y pronunciando unas palabras que se me hicieron imposible entender. Ese viejo cosquilleo que por un tiempo pensé haberlo superado, volvió, de una manera diferente, muy fuerte, casi irreconocible.
Y fue ahí, justo en ese instante, cuando mis piernas comenzaron a temblar, mi corazón latía más rápido de lo normal y casi no podía sostenerme en pie.
Volviste a hacerlo, no sé como ni de qué manera, pero lo hiciste, me volviste a enamorar, como una idiota volví a caer rendida a tus pies.
Sin embargo no me extraña nada, noté como esa llama no se había apagado del todo, se suponía que volvería a pasar, que me fue imposible olvidarte, ni tan siquiera el mero hecho que querer hacerlo me ayudó, simplemente, me hizo darme cuenta de que te quiero aún más de lo que pensaba.
martes, 10 de abril de 2012
Te amé, sin hache, porque no fue un error.
Te olvidé. No sé si es porque no valías la pena, o porque el simple hecho de quererte, me hizo abrir los ojos y darme cuenta de que me era imposible alcanzarte; pero lo hice.
Y me cuesta admitir que nada en mi vida ha cambiado tras esto, que sigo siendo la misma tonta que estuvo rendida a tus pies, y la misma que no se arrepiente de haberlo hecho.
Ahora ya puedo decir que me he rendido a mitad de camino, que tiré la toalla y quizás no la vuelva a recuperar, pero ni siquiera yo estoy segura de haberlo hecho, sigo cayendo rendida ante tu mirada, pero no de la misma forma que antes, ahora ya solo te veo como otro más, mejor que todos los demás, sí, pero eso te hace ser el más increíble inútil de la historia.
No te tengo rencor por haberme hecho derramar tantas lágrimas por ti, por haber pasado los peores momentos de mi vida y olvidarme de personas que realmente necesitaban mi atención, solo por el simple echo de no poder dejar de pensar en ti, de dedicarme en cielo y tierra a tu bienestar, a que ninguna mala palabra brotase entre nosotros. Y no te tengo rencor porque me has hecho pasar a la vez los mejores momentos que me cuesta tanto recordar.. , te he olvidado y con ello también se va todo lo que gira en torno a tu y yo.
Por estar ahí, en mi mente, y haberme hecho feliz a momentos, por todo eso y mucho más, tengo que darte las gracias; porque te seguiré queriendo, no lo dudes, pero lo haré desde un punto de vista diferente, nuevo.
Debí suponer que esto no iba a ser para siempre, que mi mente no daba ya para más, porque ha sido más de un año lleno de sufrimiento, porque fui una ilusa, y me creía todo lo que mi mente decía que iba a pasar; pero la espera era cada vez más larga y más dura.. crecemos, aparecen y desaparecen personas de nuestras vidas, maduramos.
No cabe poner en duda, que luché, porque lo hice. Busqué el amor donde no lo había, simplemente porque no lo hubo. Pero algo en mí decía que te pertenecía, que me pertenecías, supongo que me equivocaba, hay veces en la vida, en la que la mejor solución es tirar la toalla. Creo que me encuentro en una de ellas, y, que he tomado la mejor decisión.
Sé que entre nosotros nunca ha habido nada, pero en mi cabeza siempre estuviste, y me sentiría rara si no te decía esto.
No te preocupes, porque mi sonrisa no se va a borrar a causa de esto, fuimos y seremos amigos, no tiene porqué cambiar nada, mi corazón ya no pertenece a nadie, supongo que será eso, que has dejado un gran vacío en mi que estoy segura de que nadie volverá a cubrir, tu eras especial, y lo vas a seguir siendo para mí. Solo me queda decirte: enhorabuena, por ser tú, por haber hecho lo que has hecho, y por darme ese más de un año que no volverá.
Ahora ya se acabó todo.
Y me cuesta admitir que nada en mi vida ha cambiado tras esto, que sigo siendo la misma tonta que estuvo rendida a tus pies, y la misma que no se arrepiente de haberlo hecho.
Ahora ya puedo decir que me he rendido a mitad de camino, que tiré la toalla y quizás no la vuelva a recuperar, pero ni siquiera yo estoy segura de haberlo hecho, sigo cayendo rendida ante tu mirada, pero no de la misma forma que antes, ahora ya solo te veo como otro más, mejor que todos los demás, sí, pero eso te hace ser el más increíble inútil de la historia.
No te tengo rencor por haberme hecho derramar tantas lágrimas por ti, por haber pasado los peores momentos de mi vida y olvidarme de personas que realmente necesitaban mi atención, solo por el simple echo de no poder dejar de pensar en ti, de dedicarme en cielo y tierra a tu bienestar, a que ninguna mala palabra brotase entre nosotros. Y no te tengo rencor porque me has hecho pasar a la vez los mejores momentos que me cuesta tanto recordar.. , te he olvidado y con ello también se va todo lo que gira en torno a tu y yo.
Por estar ahí, en mi mente, y haberme hecho feliz a momentos, por todo eso y mucho más, tengo que darte las gracias; porque te seguiré queriendo, no lo dudes, pero lo haré desde un punto de vista diferente, nuevo.
Debí suponer que esto no iba a ser para siempre, que mi mente no daba ya para más, porque ha sido más de un año lleno de sufrimiento, porque fui una ilusa, y me creía todo lo que mi mente decía que iba a pasar; pero la espera era cada vez más larga y más dura.. crecemos, aparecen y desaparecen personas de nuestras vidas, maduramos.
No cabe poner en duda, que luché, porque lo hice. Busqué el amor donde no lo había, simplemente porque no lo hubo. Pero algo en mí decía que te pertenecía, que me pertenecías, supongo que me equivocaba, hay veces en la vida, en la que la mejor solución es tirar la toalla. Creo que me encuentro en una de ellas, y, que he tomado la mejor decisión.
Sé que entre nosotros nunca ha habido nada, pero en mi cabeza siempre estuviste, y me sentiría rara si no te decía esto.
No te preocupes, porque mi sonrisa no se va a borrar a causa de esto, fuimos y seremos amigos, no tiene porqué cambiar nada, mi corazón ya no pertenece a nadie, supongo que será eso, que has dejado un gran vacío en mi que estoy segura de que nadie volverá a cubrir, tu eras especial, y lo vas a seguir siendo para mí. Solo me queda decirte: enhorabuena, por ser tú, por haber hecho lo que has hecho, y por darme ese más de un año que no volverá.
Ahora ya se acabó todo.
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)