viernes, 2 de mayo de 2014

Tenemos el sentido del egocentrismo tan obviado que olvidamos que nosotros también podemos caer en sus garras. Que no basta con ser bueno hoy y creérselo también mañana; que la vida se trata de superarse día a día, y que no sólo superas retos, también te tienes que superar a ti  mismo como persona. Ahí y únicamente ahí es cuando podrás decir que eres un luchador, pero estarás tan pendiente del mundo que te rodea, que se te olvidará que tú también existes. Así se obvia al egocentrismo, y no queriendo obviarlo.

lunes, 21 de octubre de 2013

Amar como don

Cada persona tiene un papel en la vida. A cada uno de nosotros se nos da varios dones, algunos nunca llegamos a descubrirlos, pero están ahí, en bruto, listos para ser pulidos. Otros en cambio los desarrollamos lo suficiente como para poder vivir de ellos.
No nos referimos a ellos con ese término, decimos que una persona es capaz de correr muy rápido o que es capaz de cantar muy bien. Pero son esas capacidades las que nos hacen a cada uno de nosotros especiales.
Hay otros dones que están ahí pero que no apreciamos. Una persona que ama a otra, tiene un don.
No todos son capaces de amar. A veces simplemente gustan de otras personas o les parece llamativa su personalidad, pero no aman. No sienten.
Esa capacidad de amar a alguien es quizás la más especial de todas. Se aprende a utilizar las piernas para correr y a controlar la garganta para cantar, pero no se aprende a usar el corazón; y una persona que sabe usar el corazón es porque tiene uno muy grande, porque tiene un don.
Lo malo es que a veces sobrevaloramos ese don, le damos más importancia de la que merece y empezamos a usar el corazón en nuestra contra, empezamos a amarnos a nosotros mismos y olvidarnos de los demás.
Y es que a veces valoramos nuestro propio corazón tanto, que olvidamos que los demás también tienen uno y lo destrozamos.Y es ahí donde perdemos ese don que se nos había concedido.
Todos nacemos con un don, pero también somos susceptibles a perderlo en algún momento de nuestra vida.

viernes, 13 de septiembre de 2013

sin preguntarte un "por qué"

Seguimos adelante, saltamos sobre otras personas, nos caemos, nos levantamos, pisoteamos a los que están más abajo y envidiamos a los que están por encima, y todo eso sin preguntarnos un “por qué”.
Queremos tener una historia de amor, pero dejamos al tiempo que actúe por nosotros sin darnos cuenta de que eso no es lo correcto.
Pretendemos que todo nos vaya perfecto y cuando hay algo que falla, simplemente nos venimos abajo, no importa que haya muchas más cosas buenas, en lo que nos fijamos es en lo malo, porque simplemente destaca. ¿Qué más da que tengamos un racimo de uvas con treinta uvas? Si en la tienda vemos que tiene una uva podrida, no la compramos.
Y eso es así, pero con todo. No importa que tengas un gran corazón o mucha inteligencia, que con que tengas un solo defecto, te van a ignorar, te van a pisotear y van a hacerte creer que un defecto vale más que mil virtudes. Y lo peor es que les hacemos caso, porque criticar es un defecto, y como siempre, nos fijamos en eso, en los defectos, y hacemos caso a las críticas destructivas, porque son defectos, y llaman la atención sobre el resto de las cosas.
Entonces nos venimos abajo, nos apoyamos en la música porque de alguna forma nos gusta sentirnos identificados con alguna de sus letras.
Nos  “olvidamos” de todo lo que ha pasado y salimos a la calle con una “sonrisa” porque eres “fuerte”.
Déjame que te diga que no lo eres. Creemos tener un muro que nos proteja de lo que nos hace daño pero lo que no sabemos que ese muro en realidad está construido con  miles de lágrimas acumuladas. Haznos un favor y destrúyelo de una vez. Dime, ¿Quién se iría con una chica dura, fría, con sentimientos resguardados y que solo sabe decir “te quiero” cuando de verdad lo siente? ¿Quién se iría con ella teniendo a miles de chicas mucho más fáciles y que le dan la misma satisfacción?

Pero no puedes cambiar porque tú eres así, actúas así simplemente porque la vida te ha hecho ser así, no quieres buscar respuestas, no quieres ser como el resto de la gente, pero tampoco quieres ser tú. Sin detenerte, sin mirar atrás, sin preguntarte un “por qué”.

viernes, 7 de junio de 2013

Duele tener que expresarse a través de las palabras convertidas en textos porque no tienes a nadie con quien hablar.
Duele tener que aguantarse las lágrimas porque quieres parecerte fuerte a ti misma, duele ver como estás destrozando tu vida y no saber que hacer para arreglarla, perderse en la multitud porque tú no encajas. Duele esperar a un futuro perfecto que sabes que nunca llegará, y es por eso por lo que te quedas mirando el pasado, recordando los buenos momentos que has pasado y que ahora no tienes, desando volver a ellos y matándote por dentro porque se han quedado en eso, en simples recuerdos.

Duele ver como palabras incontroladas salen de tu boca, y que no puedas pararlas, que no puedan pararte porque tu ya has aguantado mucho, y es por simples payasadas por las que tiras el mundo a la basura y te quedas frente a un ordenador, intentando desahogarte con tristes palabras que solo recuerdan lo mal que estás. ¿Pero a quien estoy intentando engañar? 

miércoles, 22 de mayo de 2013

Y OTRAS MIL MÁS

Yo volvería a nacer mil veces más si me lo permitiesen, pero seguiría siendo la misma persona, seguiría teniendo los mismos fallos y me volvería a levantar tras las mismas caídas. Volvería a enamorarme de los mismos idiotas y volvería a derramar lágrimas por quien no las merece. Pero todo eso multiplicado por mil.
Porque hay que aprender tanto de los errores como de las victorias. Hay que aprender a dar paso a nuestra vida a aquellas personas que quieren ocupar el hueco que alguien ya dejó.
A veces nos adelantamos al destino y queremos planear lo planeado, y es a eso a lo que llamamos "error". Es por eso por lo que maldecimos todos y cada uno de los días de nuestra vida echándole la culpa al resto del mundo sin darnos cuenta de que los únicos culpables de nuestras miserias somos nosotros mismas y nuestro afán de conseguir una perfección que no existe.
Nos asusta el futuro y nos hacemos dueños del presente intentando que todo salga como nosotros queremos, sin tener en cuenta que no estamos solos y que, molestando a los demás, también lo hacemos a nosotros mismos.
Yo volvería a nacer mil veces más para joder a las mismas personas del mismo modo que yo lo hago conmigo, para que sean cómplices de una vida imperfecta, llena de heridas y vendas para curar males sin remedio y palabras que nunca olvidaré, pero al fin y al cabo la vida es un lujo que no todos se pueden permitir.

We are broken

No entiendo el amor. No sé el grado en el que se debe querer a alguien para saber que me he enamorado. Ni siquiera sé qué es el amor y hablo de él como la que más.
El amor es un miedo, es una escusa para vencer la soledad. Engañas a tus sentimientos, les dices que estás enamorada pero en realidad eso se llama miedo. Porque te asusta verte sola. Te asusta el echo de no ser como los demás, pero estamos muy equivocados.
Las personas que no están enamoradas también tienen otros sentimientos. Porque amar no significa enamorarse, pero pocas personas lo entienden. Que un "te quiero" no significa un "estoy enamorado de ti", y los besos no son candados que por obligación nos unen a esa persona.
Estamos muy equivocados con el significado de la palabra amar y es por eso por lo que, cuando de verdad nos enamoramos, a veces no sabemos reconocerlo y simplemente le llamamos miedo.
Miedo a la soledad.
Y es así como se esfuma lo que podría haber sido la felicidad infinita. Y es así como aparecen nuevas rupturas y nuevos errores. Porque nos enamoramos por obligación y no porque de verdad lo sintamos.

a mí que venga alguien y me lo explique

Yo no sé qué es estar enamorada, no sé con seguridad cuando lo estoy y de quien lo estoy. Confundo sentimientos y al final lo único que consigo es confundirme a mí. Yo no sé qué puedo hacer para estar enamorada y admitirlo porque no me avergüenzo de esa persona; yo no sé qué puedo hacer para enamorarme y estar segura de ello. Yo ya no sé como se debe amar.